DISCURSO
Memoria en defensa de lo que no me acuerdo
Imagino, olvido, indago, recurro, reviso, reparo (erre que erre), desestimo, confundo, y despisto al despiste. Re–intento, apago y re–inicio. Diferencio e in–diferencio la indiferencia, postergo, por afecto y por defecto, des–uso el uso, distraigo, omito, extravío, desvarío, in–advierto, pre–escribo, re–escribo y escribo (cribo y elimino).
Azul y verde, luna de un mar desvaído que casi ya no encuentro.
Luna rojo coral, luna de sol y de viento.
Luna de calor, de ese ardiente color amnésico.
Ausente luna blanca de cristal, de nieve y de recuerdo.
- ¿Qué opina usted Sr. XXL?
- Llámeme solo X, por favor.
- Contésteme entonces, X.
- Lo más usual es que el verbo olvidar vaya con pronombres en posición proclítica.
Pro – clítica (clítico, elemento gramatical de la tabla periódica)
- ¿Y si prefiero la forma olvidóseme, X?
- Adelante.
- Muchas gracias, X.
Rememoro, evoco, menciono y me defino (aquí prefiero la forma pro–clítica). Y re–defino la memoria como esa facultad psíquica por medio de la cual re–tengo y re–cuerdo/re–cuerda (feminizo), tengo una cuerda y tiro de ella.
Respiro, persigo, hostigo, rastreo, im–portuno (al oportuno), navego, cabalgo, pro–sigo y no sigo, me ahogo. Simpatizo, río, admiro, respaldo, insisto, secundo, incito, im–pulso, espoleo, in–fundo (no infundio), in–cito y ex–cito (y cito), alento y aliento. Persisto, reanudo, continúo, lloro, in–fiero e inter–fiero . Y me pierdo en un horizonte de sucesos en el que sucede el mayor de los vacíos, y ya son las 8 de la tarde; perdón, las cinco de la mañana.
Amparo Santamarina
Náquera, otoño 2024, en el horizonte 25
CURRÍCULUM